Hola, esta semana fue maravillosa, el FC Barcelona eliminado por el PSG Saint Germans con dos goles de Kylian Mbappe futuro jugador de la casa blanca y el gran Manchester City campeón vigente de la Champions cae ante el Real Madrid en un partido catalogado milagroso y resistencia, en fin, esto ha desatado una ola de comentarios. Como madridista reconozco que el City de Josep Guardiola dominó el juego, las estadísticas lo dicen:

* Los 18 córners del Manchester City en este encuentro son su récord en un mismo partido de Champions League. * El City tuvo más del 67% de posesión del balón. * El equipo citadino llegó 33 veces al arco. * 846 pases vs 386 del Real Madrid

Y qué pasó? El equipo merengue clasificó en la tanda de penaltis, estando más efectivo, ganado 4 a 3. Esto desató la ira de los antimadridista y por ello, decidí, escribir este post y compartir mi punto de vista.

El fútbol es más que un simple deporte, es una pasión que nos conecta a todos, una emoción que nos hace vibrar en cada gol, en cada jugada, en cada partido. Pero dentro de esta pasión, existe una figura que no encaja, que va en contra de la esencia misma del juego, esa figura es el Antimadridista.

El Antimadridista, esa persona, ese animal, esa cosa que prefiere la derrota del Real Madrid a la victoria de su propio equipo. ¿Cómo es posible? ¿Cómo puede alguien renegar de su propia esencia futbolística? Es como si el corazón de un aficionado estuviera invertido, latiendo al revés, buscando la derrota en lugar de la victoria.

Pero el Antimadridista va más allá de simplemente no ser madridista, es alguien que encuentra placer en el fracaso ajeno, que se regocija con cada tropiezo del equipo merengue. ¿Qué hay detrás de esta actitud? ¿Qué motiva a alguien a desear la derrota de un equipo en lugar de la gloria de su propio club?

Quizás sea una cuestión de rivalidad exacerbada, de sentirse inferior y buscar en la derrota del otro una forma de compensar esa sensación de inferioridad. O tal vez sea simplemente envidia, el deseo de tener lo que el Real Madrid tiene, de disfrutar de sus éxitos, de sentir la grandeza que emana del Santiago Bernabéu.

Pero más allá de las razones, lo cierto es que el Antimadridista vive en una constante negatividad, en un estado de resentimiento y frustración. No puede disfrutar del fútbol como debería, porque está atrapado en una espiral de odio y rencor hacia un club que representa todo lo que él quisiera ser.

Y así, el Antimadridista se aferra a cualquier excusa para justificar su actitud, ya sea culpando a los árbitros, al supuesto favoritismo del Real Madrid en las instituciones futbolísticas, o incluso llegando a evocar al Franquismo como una excusa para explicar los éxitos del equipo blanco. Todo vale con tal de no aceptar la grandeza del Real Madrid.

Pero en el fondo, ¿no es acaso el Antimadridista un madridista frustrado? ¿No es alguien que en su interior anhela ser parte de la grandeza blanca, pero que por alguna razón no puede serlo? Quizás sea hora de compadecerse de ellos, de entender que su actitud proviene de una profunda tristeza y complejo de inferioridad.

Porque al final del día, el fútbol debería ser una fuente de alegría y pasión, no de resentimiento y envidia. Quizás sea hora de dejar de lado las rivalidades y aprender a disfrutar del juego, sin importar los colores que uno lleve en el corazón.

Y tú, ¿qué opinas de la figura del Antimadridista? ¿Crees que es posible sentir esa pasión por el fútbol sin caer en la negatividad y el resentimiento? ¡Comparte tu opinión en los comentarios y únete al debate!

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